Que esta visita de su Santidad, sirva para que muchos colombianos reflexionen acerca de la necesidad y conveniencia del fín del Conflicto Armado y por lo tanto, limpien su interior de odios, resentimientos y sed de venganza, terminando de una vez por todas con esta absurda polarización política en que tienen inmerso al país. Pidámos a Dios de igual manera, para que cese el efecto desvastador del Huracan Irma y la tranquilidad regrese a las Costas de EU, Centroamérica e Islas del Oceano Atlántico. Amén!.