Señor, en esta hermosa mañana en la cual me has permitido contemplarla con mis ojos, te doy gracias porque tú misericordia es tan grande, que alcanza para roder toda la tierra, te reconozco como al único sabio y santo Dios que nos creo y nos dió aliento de vida, y sabiendo que lo puedes todo, pidoque bengitas cada presidente en las naciones y que proveas de paz y amor cada criatura que invoque tu precioso nombre y que derrames gotas de rocío convertidas en bendición sobre cada hogar en donde haya un hijo tuyo que predique tu bendita palabra. Amén.