Padre mio hoy como todos los días te doy gracias por haberte fijado en mi, gracias por haber muerto en esa cruz y pagar una deuda que no te correspondía pero era una deuda que yo no podía pagar, aunque estoy en proceso de fe pues ne cuesta mucho trabajo creer totalmente y ahí es donde el enemigo se aprovecha y me hace sufrir, pero aun así me estoy esforzando a tener una relación contigo y dejar de luchar con mis propias fuerzas y permitir que tu transformes mi vida para lograr el propósito por el cual fui creada... Por Cristo Jesús te lo pido Amén y amén